• Ir a navegación principal
  • Ir al contenido principal
  • Ir a la barra lateral primaria
Tamara -arroyo, Psicología y mujer

Tamara -arroyo, Psicología y mujer

Consigue una sana relación contigo misma y tu cuerpo para establecer relaciones satisfactorias con los demás a través del vínculo terapéutico.

  • BIENVENIDA
  • ME PRESENTO
  • SERVICIOS
  • REGALO
  • BLOG
  • CONTACTO

Archivos para abril 2014

EL PRINCIPITO. Un ejemplo sobre la vinculación.

abril 28, 2014 by Dejar un comentario

Imagen

«… Pero sucedió que el principito, habiendo atravesado arenas, rocas y nieves, descubrió finalmente un camino. Y los caminos llevan siempre a la morada de los hombres. 

 — ¡Buenos días! —dijo.

Era un jardín cuajado de rosas.

 — ¡Buenos días! —dijeran las rosas.

El principito las miró. ¡Todas se parecían tanto a su flor!

— ¿Quiénes son ustedes? —les preguntó estupefacto.

—Somos las rosas —respondieron éstas.

— ¡Ah! —exclamó el principito.

Y se sintió muy desgraciado. Su flor le había dicho que era la única de su especie en todo el universo. ¡Y ahora tenía ante sus ojos más de cinco mil todas semejantes, en un solo jardín! (…)

Y luego continuó diciéndose: “Me creía rico con una flor única y resulta que no tengo más que una rosa ordinaria. Eso y mis tres volcanes que apenas me llegan a la rodilla y uno de los cuales acaso esté extinguido para siempre. Realmente no soy un gran príncipe… “Y echándose sobre la hierba, el principito lloró.

Entonces apareció el zorro:

— ¡Buenos días! —dijo el zorro.

— ¡Buenos días! —respondió cortésmente el principito que se volvió pero no vio nada.

—Estoy aquí, bajo el manzano —dijo la voz.

— ¿Quién eres tú? —Preguntó el principito—. ¡Qué bonito eres!

—Soy un zorro —dijo el zorro.

—Ven a jugar conmigo —le propuso el principito—, ¡estoy tan triste!

—No puedo jugar contigo —dijo el zorro—, no estoy domesticado.

— ¡Ah, perdón! —dijo el principito.

Pero después de una breve reflexión, añadió:

— ¿Qué significa “domesticar”?

—Es una cosa ya olvidada —dijo el zorro—, significa “crear vínculos… “

— ¿Crear vínculos?

—Efectivamente, verás —dijo el zorro—. Tú no eres para mí todavía más que un muchachito igual a otros cien mil muchachitos y no te necesito para nada. Tampoco tú tienes necesidad de mí y no soy para ti más que un zorro entre otros cien mil zorros semejantes. Pero si tú me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo…

—Comienzo a comprender —dijo el principito—. Hay una flor… creo que ella me ha domesticado…

—Mi vida es muy monótona. Cazo gallinas y los hombres me cazan a mí. Todas las gallinas se parecen y todos los hombres son iguales; por consiguiente me aburro un poco. Si tú me domesticas, mi vida estará llena de sol. Conoceré el rumor de unos pasos diferentes a todos los demás. Los otros pasos me hacen esconder bajo la tierra; los tuyos me llamarán fuera de la madriguera como una música. Y además, ¡mira! ¿Ves allá abajo los campos de trigo? Yo no como pan y por lo tanto el trigo es para mí algo inútil. Los campos de trigo no me recuerdan nada y eso me pone triste. ¡Pero tú tienes los cabellos dorados y será algo maravilloso cuando me domestiques! El trigo, que es dorado también, será un recuerdo de ti. Y amaré el ruido del viento en el trigo.

El zorro se calló y miró un buen rato al principito:

—Por favor… domestícame —le dijo.

—Bien quisiera —le respondió el principito pero no tengo mucho tiempo. He de buscar amigos y conocer muchas cosas.

—Sólo se conocen bien las cosas que se domestican —dijo el zorro—. Los hombres ya no tienen tiempo de conocer nada. Lo compran todo hecho en las tiendas. Y como no hay tiendas donde vendan amigos, los hombres no tienen ya amigos. ¡Si quieres un amigo, domestícame!

— ¿Qué debo hacer? —preguntó el principito.

—Debes tener mucha paciencia —respondió el zorro—. Te sentarás al principio un poco lejos de mí, así, en el suelo; yo te miraré con el rabillo del ojo y tú no me dirás nada. El lenguaje es fuente de malos entendidos. Pero cada día podrás sentarte un poco más cerca…

El principito volvió al día siguiente.

—Hubiera sido mejor —dijo el zorro— que vinieras a la misma hora. Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto, descubriré así lo que vale la felicidad. Pero si tú vienes a cualquier hora, nunca sabré cuándo preparar mi corazón… Los ritos son necesarios.

— ¿Qué es un rito? —inquirió el principito.

—Es también algo demasiado olvidado —dijo el zorro—. Es lo que hace que un día no se parezca a otro día y que una hora sea diferente a otra. Entre los cazadores, por ejemplo, hay un rito. Los jueves bailan con las muchachas del pueblo. Los jueves entonces son días maravillosos en los que puedo ir de paseo hasta la viña. Si los cazadores no bailaran en día fijo, todos los días se parecerían y yo no tendría vacaciones.

De esta manera el principito domesticó al zorro. Y cuando se fue acercando el día de la partida:

— ¡Ah! —Dijo el zorro—, lloraré.

—Tuya es la culpa —le dijo el principito—, yo no quería hacerte daño, pero tú has querido que te domestique…

—Ciertamente —dijo el zorro.

— ¡Y vas a llorar!, —dijo él principito.

— ¡Seguro!

—No ganas nada.

—Gano —dijo el zorro— he ganado a causa del color del trigo.

Y luego añadió:

—Vete a ver las rosas; comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme adiós y yo te regalaré un secreto.

El principito se fue a ver las rosas a las que dijo:

—No son nada, ni en nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ustedes han domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros.

Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo.

Las rosas se sentían molestas oyendo al principito, que continuó diciéndoles:

—Son muy bellas, pero están vacías y nadie daría la vida por ustedes. Cualquiera que las vea podrá creer indudablemente que mí rosa es igual que cualquiera de ustedes. Pero ella se sabe más importante que todas, porque yo la he regado, porque ha sido a ella a la que abrigué con el fanal, porque yo le maté los gusanos (salvo dos o tres que se hicieron mariposas ) y es a ella a la que yo he oído quejarse, alabarse y algunas veces hasta callarse. Porque es mi rosa, en fin.

Y volvió con el zorro.

—Adiós —le dijo.

—Adiós —dijo el zorro—. He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos.

—Lo esencial es invisible para los ojos —repitió el principito para acordarse.

—Lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tú has perdido con ella.

—Es el tiempo que yo he perdido con ella… —repitió el principito para recordarlo.

—Los hombres han olvidado esta verdad —dijo el zorro—, pero tú no debes olvidarla. Eres responsable para siempre de lo que has domesticado. Tú eres responsable de tu rosa…

—Yo soy responsable de mi rosa… —repitió el principito a fin de recordarlo…»

ANTOINE DE SAINT – EXUPERY

EL PRINCIPITO

Archivado en:Uncategorized Etiquetado con:alas de mar, Biosíntesis, domesticar, principito, psicología, responsabilidad, vínculo

Barra lateral primaria

Entradas recientes

  • “Etxea, ihesaldia eteten den lekua da / El hogar es ese lugar donde la huida termina «
  • NUEVO TALLER ONLINE
  • Transiciones y digestiones
  • Oráculo Mujer Loto
  • Ritual de cierre de año

Comentarios recientes

  • admin en “Etxea, ihesaldia eteten den lekua da / El hogar es ese lugar donde la huida termina «
  • Isabel en “Etxea, ihesaldia eteten den lekua da / El hogar es ese lugar donde la huida termina «
  • Nek Ane en 6 de marzo, DÍA INTERNACIONAL POR EL AMOR PROPIO, PORQUE YO LO VALGO

Archivos

  • marzo 2021
  • mayo 2020
  • septiembre 2019
  • enero 2019
  • diciembre 2018
  • octubre 2018
  • septiembre 2018
  • marzo 2018
  • noviembre 2017
  • octubre 2017
  • septiembre 2017
  • agosto 2017
  • febrero 2017
  • junio 2016
  • marzo 2016
  • abril 2015
  • diciembre 2014
  • noviembre 2014
  • mayo 2014
  • abril 2014
  • marzo 2014
  • febrero 2014
  • enero 2014
  • julio 2013
  • junio 2013
  • mayo 2013
  • abril 2013

Categorías

  • Uncategorized

Meta

  • Acceder
  • Feed de entradas
  • Feed de comentarios
  • WordPress.org

Copyright © 2023 · Genesis Sample on Genesis Framework · WordPress · Iniciar sesión

Esta web usa Cookies para mejorar tu experiencia de usuario. Entiendo que estás de acuerdo, pero tienes derecho a rechazarlo cuando quieras. Configuración de CookiesACEPTAR
Privacidad y Política de Cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these cookies, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may have an effect on your browsing experience.
Necesarias Siempre activado

Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.

No necesarias

Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.